
JW Choi, Corea
Soy miembro de la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial que cree en Cristo Ahnsahnghong y Dios Madre, quisiera compartir mi entendimiento con mis hermanos.
Hace unos meses, mi voz empezó a quebrarse y se oía ronca. Por eso fui al médico, el cual me dijo que tenía laringitis por reflujo; fue el reflujo ácido lo que causó que mi laringe se infectara. Como me dijo que me tomaría varios meses de tratamiento, dejé salir inconscientemente un suspiro.
El médico me recetó medicina para un mes y me hizo conocer algunas restricciones que venían con ella. Me dijo las cosas que no debía comer y el cambio de estilo de vida que necesitaba: no beber café o soda, que pudiera causar reflujo ácido, y en cambio beber mucha agua, hacer ejercicio y evitar acostarme inmediatamente después de comer. Yo no soy de las personas que suelen tomar medicamentos. Sin embargo, decidí tomarlos a la hora prescrita, porque esta vez mis síntomas eran serios. Después de un mes, fui nuevamente al médico. Me dijo que mi condición había mejorado, y me preguntó si había evitado la comida que no debía comer y si había cambiado mi estilo de vida. Cuando pensé en esto cuidadosamente, yo había tomado la medicina regularmente, pero no presté mucha atención a sus instrucciones.
“Traté tanto como pude.”
Al verme un tanto incómodo, se dirigió a mí con seriedad en su rostro.
“Las restricciones que le di, además de la medicina, también son parte de la receta. Usted mejorará pronto solo si sigue mis instrucciones.”
Sentí un pinchazo en mi conciencia. Repitiendo las restricciones, me pidió seriamente que las guardara.
En realidad, antes de ir nuevamente a ver al médico, tuve algunas quejas porque mis síntomas no mejoraban tanto como pensaba, a pesar de tomar la medicina regular y exactamente según lo prescrito. Sin embargo, nohabía sido culpa del médico, sino mi culpa: no seguí detenidamente sus instrucciones.
Debí haber guardado en mi mente las restricciones y haberlas seguido, sin mencionar que debí haber tomado la medicina para mejorarme pronto. Si me hubiera sentido mejor tomando solo la medicina, habría podido haber un riesgo constante de sufrir una recaída, a menos que cambiara mis malos hábitos. Para mejorar y estar saludable, no debo rechazar ni una sola cosa. Ahora reflexiono sobre cómo está mi salud espiritual. Para salvar mi alma que estaba muriendo a causa del pecado, Dios mismo estableció las leyes del nuevo pacto. Además, Dios me da las palabras de instrucción en el momento apropiado, a fin de que pueda recibir una generosa bienvenida en el reino de los cielos.“Ámense unos a otros, sean humildes, no se quejen…”Dios, que examina mi corazón y mi mente, me da la mejor receta para mi alma.Sin embargo, cuando contemplo mi pasado, veo que no grabé en lo profundo de mi corazón las palabras de instrucción que la Madre me dio en el momento adecuado, y que tampoco me esforcé por obedecerlas, a pesar de asistir a los cultos regular y diligentemente; no comprendía que la palabra de la Madre era la receta para mi alma, que debía seguir para mi salvación.
Ahora seguiré todas las palabras de Cristo Ahnsahnghong y Dios Madre con obediencia, porque es la única manera de que mi alma esté completamente curada y de permanecer saludable hasta el día que regrese al reino de los cielos..
5 comentarios
En nuestra época, Cristo Ahnsahnghong y Dios Madre(la Madre Celestial) son los doctores espirituales para nosotros.
Dios Madre(la Madre Celestial) está con nosotros en la carne aun hasta ahora y está dando la receta espiritual para curar nuestra enfermedad que es nuestro pecado y para llevarnos al reino de los cielos.
Pero, no estoy siguiéndola completamente pensando que no puedo hacerlo porqué la situación de ahora es muy difícil, o es muy difícil cambiar mi carácter. Estas desobediencias crecieron mi enfermedad.
Yo tango pena mucho porqué Cristo Ahnsahnghong y Dios Madre(la Madre Celestial) vinieron a esta tierra en la carne para salvarme en quien tenía que morir por mi enfermedad, con la receta de nuevo pacto.
Yo también voy a seguir la receta de Dios Madre totalmente y rechazar esta enfermedad y entrar en el reino de los cielos.
Les doy gracias a Dios Padre y Dios Madre por su gran amor.
Amén! Yo también quiero seguir las palabras de Dios Padre Crsito Ahnsahnghong y Dios Madre(la Madre celestial), las cuales son la receta espiritual, hasta al final.
Y espero regresar al reino de los cielos curandonos de todas las enfermedades espirituales
La receta de la salvación que Dios nos ha permitido es rectamente los mandamientos de Dios.
Todos los mandamientos de Dios son un recetario prescrito por Dios como médico espiritual a fin de salvar a nosotros que somos destinados a morir.
Para curarnos de enfermedad espiritual, sin falta debemos seguir este recetario.
Por cuanto hacemos conforme a la receta espiritual que nos permitieron Dios Padre Cristo Ahnsahnghong y Dios madre(la Madre celestial), vamos a curarnos de la enfermedad espiritual.
Y saliendo de hospital espiritual regresemos al reino de los cielos que es nuestro hogar espiritual.
Gracias a Cristo Ahnsahnghong(DIos Padre) y la Madre celestial(Dios Madre) por permitirnos los mandamientos que son la receta de la salvación para sanidad de nuestro espiritu
Yo sé que estaba buscando el pretexto de racionalización para evitar situación en la que no quiero y difícil.
Sin embargo, la Madre siempre me esperaba que yo cambiaría y no me dejaba.
le doy gracias a la Madre Celestial quien me abraza con inmenso amor.
Hágame hacer su voluntad, no solo palabra.
sinceramente, quiero ser seguir su voluntad según todas sus palabras, como la fragancia de Sion.