
Esta es la fragancia de un miembro de la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial que creen en Cristo Ahnsahnghong y en Dios Madre.
LH. Sun y Yg. Sun , Corea
Trabajamos juntas en una pequeña tienda, y también predicamos la palabra de Dios a nuestros clientes.
Un día, una anciana llegó a nuestra tienda. Mientras conversábamos con ella, nos enteramos de que asistía a una iglesia, y le preguntamos por qué iba a la iglesia.
“Yo solo soy una peregrina en esta tierra. Por eso quiero ir al cielo, mi hogar espiritual. Esa es la razón por la que voy a la iglesia.”
Le enseñamos la verdad de la pascua, diciéndole que debíamos guardarla para entrar en el reino de los cielos. Después de unos días, visitó nuevamente nuestra tienda, y estudió la Biblia con ojos tan brillantes que olvidamos su edad. Luego nos pidió que escribiéramos los versículos de la Biblia que había estudiado, diciendo que quería volver a leerlos en casa. Así estudió la Biblia con más frecuencia, y una semana antes de la fiesta de Pentecostés, renació como hija del verdadero Dios, diciendo: “No tengo duda de que esta es la verdad absoluta”.
La primera vez que escuchó la verdad, se sintió confundida porque había sido muy devota y activa en una iglesia protestante; había servido como maestra de una escuela dominical y también como líder misionera durante mucho tiempo. Sin embargo, ya que creía que nada es más importante que la palabra de Dios, finalmente pudo discernir la verdad.
Ella dijo que muchas veces había sido persuadida para alcanzar una posición alta en la iglesia protestante, pero siempre había rechazado la propuesta. Esto se debía a que ella pensaba que la posición no tenía nada que ver con su salvación. Por otro lado, era tan entusiasta para aprender la palabra de Dios que cuando tenía una pregunta acerca de la Biblia, no dudaba en preguntar a una persona con una posición más alta o a un miembro del personal pastoral por sus interrogantes. Y ellos solo decían: “Usted solo necesita creer”. Sus respuestas nunca pudieron satisfacerla. Como se había mudado a otro lugar unos meses antes, empezó a ir a una nueva iglesia. Sin embargo, la iglesia tampoco sació su sed espiritual.
Fue en esos días que nos conocimos. Cuando ella le preguntó al pastor de esa iglesia acerca de la pascua, le dijo cosas diferentes de la Biblia, por eso no le volvió a preguntar. Ella dijo: “Yo solo creo en la palabra de Dios”; ella era verdaderamente una hija de Dios.
Guardando con alegría la semana de oración para el día de Pentecostés, enfrentó una situación difícil. Unas personas de la iglesia a la que había asistido durante mucho tiempo, la visitaron y confundieron su corazón con muchas palabras. Esto la hizo sufrir mucho, pero ella pensó que debía temer a Dios, y no a las personas, y les dijo directamente: “He encontrado la verdad. Por eso, ya no vuelvan a visitarme”.
Ella recibió el Espíritu Santo de la lluvia tardía en abundancia a través del día de Pentecostés. Ahora dice: “Ya que he recibido al verdadero Dios, no tengo remordimiento aunque muera hoy”. Aunque hay muchas cosas que le causan problemas, está abrigando alegremente la esperanza en el cielo en Sion. Es muy conmovedor verla así. Ella quiere predicar ansiosamente la verdad a sus conocidos. Creemos que Dios, quien conoce su corazón, le permitirá llevar fruto tarde o temprano.
Una vez más, comprendemos esto: hay muchas almas que están anhelando la palabra de Dios y buscando ansiosamente la verdad, y nosotros, que hemos comprendido más temprano la verdad, debemos predicarles el evangelio. Entonces hoy, como cualquier otro día, tocaremos fuertemente la trompeta del evangelio aquí en nuestro centro de trabajo, que es el campo del evangelio que se nos ha concedido, a fin de encontrar a los miembros de nuestra familia celestial que regresarán a Sion cuando escuchen la voz de Dios diciendo: “Salid de ella, pueblo mío” (Ap. 18:4).
3 comentarios
¡Qué hermosa fragancia de Sion!
Hay muchos hermanos del cielo que todavía no podíamos buscar en esta tierra.
Tocaremos la trompeta del evangelio fuertemente para buscar a los hermanos perdidos.
Y quiero regresar al reino de los cielos junto con la Madre Celestial(Dios Madre), que Dios Padre Ahnsahnghong está esperando…
Hace poco tiempo, durante la fiesta de la predicación de los tabernáculos, el primer pastor nos dijo:
«La razón por la que predicamos este evangelio en todo el mundo es no para desarrollar nuestra iglesia, ni para extender la influencia de nuestra iglesia sino para buscar los hermanos y las hermanas perdidos quienes son la familia espiritual, por eso queremos guiarles a la patria celestial donde es el reino de los cielos.»
Es claro que hay los hermanos y las hermanas perdidos en alguna parte. Y Nuestra Madre Celestial (Dios Madre) está esperando ansiosamente que sus hijos regresen.
Voy a predicar fervientemente y quiero guiar los hermanos espirituales a Dios Madre.
Y quiero ser la hija que da gozo a Dios Madre (la Madre Celestial)
Venga a la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial.
La Predicación es buscar de los hermanos del cielo.
Realmente, nuestros hermanos perdidos del cielo todavía están vagando en el mundo para buscar la verdad y están esperando la voz de nuestros pardres celestiales.
Por lo tanto yo también predicaré fuertemente para que busque nuestros hermanos espirituales rapidamente.