
En esta época debemos encontrar sin falta a Dios Madre, la Esposa, que nos da la vida. Por eso Jesús nos enseñó la parábola del banquete de bodas del reino de los cielos para hacernos conocer a la Madre celestial.
La Biblia nos muestra muchas profecías con relación a la aparición de Dios Madre. Entre ellas, estudiemos acerca del “Banquete de bodas celestial” para entender a Dios Madre, quien debe aparecer para permitirnos la bendición eterna en esta última época.
La razón por la que Jesús nos habló por parábolas
Jesús permitió enseñanzas a sus discípulos a través de muchas parábolas. Entonces, ¿qué quería que realmente supiéramos a través de tales parábolas? Además, ¿cuál será la razón por la que les habló en parábolas en lugar de explicarlo fácilmente? En primer lugar, confirmemos este asunto a través de las palabras de Jesús.
Jesús escondió el secreto del reino de los cielos en parábolas
Mateo 13:10-11 “Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les hablas por parábolas? El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado.”
Aquellos a quienes les es dado conocer el secreto del reino de los cielos y aquellos a quienes no les es dado.
Lo que Jesús realmente quería decirnos es el secreto del reino de los cielos. Sin embargo, no se le permite a cualquiera sino solo a los escogidos por Dios.
Lo mismo se aplica a la parábola del banquete de bodas celestial. Desde aquí, podemos encontrar el secreto del cielo y obtener la sabiduría para recibir la salvación. No obstante, esas palabras no son para todos. Ya que Dios habló en parábolas, es un secreto para aquellos que no entienden su significado.
¿Cuál será el secreto que está escondido en el banquete de bodas celestial?

Parábola del banquete de bodas celestial
Significado de la parábola del banquete de bodas celestial
En esta parábola, Jesús explicó que el cielo es como un rey que preparó un banquete de bodas. La razón por la que comparó al cielo con un banquete de bodas es que aquellos que puedan entender las palabras de la parábola entrarán en el reino de los cielos. Él explicó que aquellos que no puedan participar en el banquete de bodas deben ser arrojados a las tinieblas. No podrán obtener la salvación. A fin de participar en el banquete de bodas y entrar en el reino de los cielos, definitivamente debemos entender las palabras de la parábola.
Entonces, ¿quién debe participar en el banquete de bodas? Por lo general, debe haber un novio, una novia y asimismo los invitados para el banquete. Solo con la presencia del novio, la novia y también los invitados, se puede llevar a cabo un banquete. A través de las palabras de la parábola aquí, confirmamos que el rey que preparó un banquete de bodas representa a Dios, y el que aparece como hijo de Dios indica a Jesús. Además, los convidados que fueron invitados al banquete de bodas representan a los santos de Dios.
Marcos 2:19 “Jesús les dijo: ¿Acaso pueden los que están de bodas ayunar mientras está con ellos el esposo? Entre tanto que tienen consigo al esposo, no pueden ayunar.”
No obstante, hay algo extraño en la parábola del banquete de bodas en el libro de Mateo; aparecen el hijo, que es el novio, y los invitados, pero no la novia. Entonces, ¿cuál es la razón?

Los santos nunca pueden ser la novia porque ellos son los convidados en el banquete de bodas celestial. Es decir, debe existir la novia aparte de los convidados.
¿Cuándo aparecerá la Esposa y quién es ella?
La razón es que la novia no debe aparecer en la primera venida de Jesús, sino en los últimos días que será el fin de los seis mil años de la obra de la salvación. Confirmemos si la novia aparece en los últimos días a través de las palabras de Dios.
La esposa aparecerá en los últimos días junto con Cristo en su segunda venida
Apocalipsis 19:7-9 “Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado. Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos. Y el ángel me dijo: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero. Y me dijo: Estas son palabras verdaderas de Dios.”
El ángel dijo que aquellos que son invitados a la cena de las bodas del Cordero son bienaventurados. Para participar en esta bendición, todos debemos participar en el banquete de bodas. Para participar en el banquete de bodas, debemos conocer al novio y la novia. En primer lugar, el Cordero, que es el novio, representa a Jesús. Además, Jesús que está escrito en el libro de Apocalipsis, representa a Jesús en su segunda venida. Entonces, ¿quién aparece junto con Jesús en su segunda venida? “La esposa del Cordero” que no había aparecido en la primera venida, aparecerá en el banquete de bodas.
Entonces, ¿quién es la esposa del Cordero? Muchas iglesias insisten en que la esposa del Cordero representa a los santos de Dios. ¿Será cierto? Si la esposa del banquete de bodas representa a los santos, entonces una novia necesita aparecer en el libro de Mateo. Sin embargo, como hemos estudiado antes a través de las palabras de Jesús, está claramente confirmado que la novia no estaba escrita en el tiempo de su primera venida, y también los santos fueron comparados con los invitados del banquete de bodas. Por estas razones, su insistencia es incorrecta. Entonces, estudiemos quién es la esposa del Cordero y cómo estamos relacionados con ella, a través de la Biblia.
La esposa es Jerusalén celestial, Dios Madre
Apocalipsis 21:9-10 “Vino entonces a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la desposada, la esposa del Cordero. Y me llevó en el Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la gran ciudad santa de Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios.”
Aquí, ¿a quién dijo el ángel que nos mostraría? A la desposada, la esposa del Cordero. ¿Y qué nos mostró? A la Jerusalén celestial. Por lo tanto, la desposada, que es la esposa del Cordero, es la Jerusalén celestial. Continuemos confirmando qué relación tenemos con la Jerusalén celestial, mediante el libro de Gálatas.
Gálatas 4:26 “Mas la Jerusalén de arriba, la cual es madre de todos nosotros, es libre.”
¿Quién dice que es la Jerusalén de arriba? Es nuestra Madre celestial. Así como Jesús dijo que Dios Padre era nuestro Padre en el cielo, el apóstol Pablo también explicó que Dios Madre es nuestra Madre en el cielo. Asimismo, la Biblia testifica claramente que Jesús en su segunda venida, quien aparecerá en los últimos días, debe aparecer con su esposa, Dios Madre. Entonces, ¿qué deben hacer el novio y la novia cuando aparezcan juntos? Confirmémoslo a través de la Biblia.
En la última época, Dios Padre y Dios Madre, el Espíritu Santo y la Esposa, nos darán el agua de la vida
Apocalipsis 22:17 “Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.”
Aquí, el Espíritu Santo representa a Dios Padre, el novio en el banquete de bodas. Dios Padre y Dios Madre, que son el novio y la novia, dicen: “Ven”. Esto significa que nos están invitando a su banquete de bodas. Dicen que permitirán el agua de la vida gratuitamente, la vida eterna, a aquellos que estén invitados.

El propósito del banquete de bodas celestial es darnos la vida eterna a los hijos de Dios.
En las palabras de la parábola en el libro de Mateo, Dios dijo que aquellos que no participen en el banquete de bodas deberán ser arrojados a las tinieblas de afuera, donde será el lloro y el crujir de dientes.

Aquellos que no participen en el banquete de bodas no serán salvos
Para participar en el banquete de bodas, debemos conocer al novio y la novia, y recibirlos
Esto representa que los que no participen en el banquete de bodas no podrán entrar en el reino de los cielos. A través de la parábola del banquete de bodas, podemos entender claramente las profecías sobre Cristo en su segunda venida y Dios Madre que deben aparecer en esta última época. Los que cumplen todas las profecías de la Biblia y establecieron la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial, son Jesús en su segunda venida, Cristo Ahnsahnghong, y Dios Madre. Todos busquemos y conozcamos al Padre Ahnsahnghong y a Dios Madre, y participemos en el banquete de bodas celestial para obtener la salvación sin falta.
9 comentarios
¡Qué bienaventurado esta bendición! Dios Padre y Dios Madre nos dieron permiso entrar al reino de los cielos por el banquete de bodas celestial. Muchas gracias a Dios Elohim por permitirnos conocer este secreto del cielo y me abrir mis ojos para que pueda reconocer a nuestra Madre celesitial. Creo en Cristo Ahnsahnghong que nos hizo conocer a Dios Madre y seguiré hasta el final a Dios Madre. Espero que todo el mundo reciban la bendición de salvación de la Madre celestial.
Sí es cierto. Nosotros somos los invitados en el banquete de bodas celestial y nunca puede ser la novia. La novia debe ser la que pueda dar la bendición de salvación. Nosotros no tenemos el poder de salvación sino somos los que necesitan recibir la bendición. Gracias a Dios Madre por venir a esta tierra para nuestra salvación. La amo mucho mi Salvadora quien se sacrifico por mi.
La novia es la Esposa del Espíritu Santo, Dios Padre. Ella nos da el agua de la vida junto con Dios Padre en la última época. Gracias a la Madre celestial(Dios Madre) por venir a esta tierra.
El reino de los cielos donde regresaremos en un futuro es nuestra casa eterna.
Allí existe el amor eterno y la eterna felicidad. Y viviremos para siempre junto con nuestro Padre celestial, nuestra Madre celestial y nuestros hermanos celestiales. Quiero regresar rápido.
La Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial cree en Dios Padre Ahnsahnghong y Dios Madre quienes son nuestros Salvadores.
Para obtener la salvación debemos creer en Dios Padre y Dios Madre.
Solo los que son llamados y participan a la cena de las bodas del cielo recibirán la bendición de la vida eterna.
El Espiritu Santo y la Esposa son nuestro Padre celestial y nuestra Madre celestial.
Nosotros somos invitados, no somos novias. Sin la novia, la boda no puede realizarse. Por lo tanto, la novia, la Madre celestial debe aparecer en esta época en carne con el novio conforme a las profecías de la Biblia.
Para obtener esta bendición, todos nosotros debemos participar en el banquete de bodas. Para esto debemos conocer al novio y la novia.
el Espíritu Santo representa a Dios Padre, el novio y Dios Madre a la novia en el banquete de bodas. Dios Padre y Dios Madre, que son el novio y la novia, dicen: “Ven”. Esto significa que nos están invitando a su banquete de bodas.